Algo me pasa en estos días que no puedo conciliar el sueño.
Algo ocurre en mi país que me impide colocar mi cabeza sobre mi almohada.
Algo sucede en mi ciudad, que no puedo cerrar los ojos.
Y no puedo decir que no puedo soportar la lluvia, porque en todo lo que va del año solo ha llovido un día y fue una lluvia pinchurrienta.
No sé si tiene que ver con el hecho de que durante más de cuatro pinches años fui un fantasma, una alucinación.
Tampoco puedo decir de cierto, si esta incapacidad mía para conciliar el sueño está relacionada a que hubo alguien en mi existencia, hace muchos años atrás, que nunca entendió cuánto la necesité, cuánto la quise. O no le importó. O que yo nunca entendí a tiempo, que a esa persona simple y llanamente le atraían, digamos, otra clase de personas.
Y si les digo que mi insomnio tiene que ver con que me he estado distrayendo y he tenido muchas dificultades para continuar con el cumplimiento de mis objetivos, les estaría mintiendo, porque no es así.
Así tampoco me quita el sueño aquella frustrada fantasía de ser campeón olímpico de judo, boxeo, lucha grecorromana, cien metros planos y salto de longitud. Ser campeón de levantamiento de tarro ya es suficiente satisfacción deportiva para mí.
Creo tener una respuesta y no estoy del todo seguro que sea la respuesta correcta. Creo que estoy excitado. Creo que estoy demasiado emocionado, quiero dar más de eso que doy y quiero recibir más de eso que recibo. Esto es lo que me pasa:
Anomalías del sueño que presento
Me inquietan, pero también me incitan a
Osar tocar el cielo y al mismo tiempo el suelo
A ningún lado he de llegar con eso
A ningún pinche lado quiero ir
Nada parece hacerme entender o
Analizar mejor mi situación
Digamos que por ahora
Intento dirigir mi atención
Largamente desviada hacia otras
Materias, pero son estudios inconclusos,
Anárquicos y feroces, pero me hacen feliz.
3 comentarios:
que la corriente social no nos diga quien somos, mi ben buen, que la inercia de lo que hacemos no nos detenga, no nos sepulte; no permitamos que el mundo exterior nos defina, nos nos apague; es una cuestión de vida o muerte...
es preferible morir que vivir una vida que no es nuestra...
Venga, que sea por eso!
Publicar un comentario